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​NOSOTROS

El  IMTC  es una institución formada en el año 1993 por el Dr. Chung, con la experiencia de 9 generaciones de médicos chinos tradicionales, y actualmente su hijo Dr. Ting Chung, 10° generación, es su actual heredero y difusor.

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DIRECTOR

Dr. Ching Chung

Médico descendiente en novena generación de una familia de médicos ilustres de China, originario de Taiwán, con amplia experiencia de vida en Japón. Realizó prácticas, investigaciones y carrera docente de Medicina Tradicional China (MTC) en dichos países. Actualmente es presidente de la Asociación Civil Argentina de MTC y director ejecutivo de la World Federation of Chinese Medicine Societies.

Fundó en la Argentina el Instituto de la Medicina Tradicional China (IMTC, 1993) y la Fundación para el Desarrollo de la Cultura China (FDCC, 1996), con amplio apoyo de la Embajada de República Popular China y profesionales destacados de distintas áreas como asesores y miembros de la misma institución. En Septiembre del año 2003, recibió un reconocimiento de la China Association of Chinese Medicine por su labor en la difusión de la MTC. En Agosto del año 2010, la World Academic Society of Medical Qigong premió al Dr. Chung por su contribución a expandir el Qigong medicinal en el mundo  y por su labor en mejorar la calidad de vida de la humanidad. En Mayo del 2017 fue homenajeado por la Legislatura Porteña de Buenos Aires por su trabajo y difusión de la MTC en Argentina.

Dr. Chiang Song Chung (Padre)

Nació en Pan-Chiao, Taiwán en el año 1909 y falleció en el año 1983. Perteneció a una familia de médicos confucionistas cuya especialidad fue la oftalmología. A los dieciséis años comenzó sus estudios médicos en China continental, finalizándolos en Japón hacia el año 1943.

De regreso a Taiwán, en tiempo de guerra y profunda crisis, era difícil contar con lo necesario por lo que desde que comenzó su actividad, ejerció su profesión con amor y servicio, atendiendo a los necesitados sin cobrar sus honorarios. Cuando finalizó la guerra recibió un inmenso reconocimiento por parte de sus pacientes. Su marcado compromiso social lo llevó a fundar varias salas de primeros auxilios en las villas y a participar en la creación de una iglesia. Su trabajo social fue muy importante para los niños, ya que creó un jardín de infantes para aquellos que no tenían acceso a instrucción. En reconocimiento a su labor, el gobierno de Taiwán lo premió con el título de Ciudadano Ilustre.

Su actividad docente fue permanente, sus primeros alumnos venían a su consultorio, y más tarde fue invitado para dar clases de Medicina Tradicional China por catedráticos de Japón. En este país enseñó en la Universidad y en la Asociación de Medicina Oriental. Dictó varias conferencias y cursos sobre la Medicina Tradicional China en diferentes países orientales, entre ellos Corea del Sur.

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